Evita las infecciones este verano siguiendo estos consejos de salud íntima

¡Hola chicas! Llegan los días de playa, piscina y sol, pero también el calor y la humedad, que pueden afectar a nuestra salud íntima. Pero no te preocupes, hoy te traemos algunos tips para mantener tu zona íntima sana y fresca durante todo el verano y evitar esas molestas infecciones. Además, te adelantamos que en el siguiente apartado hablaremos sobre los cuidados específicos que debes tener en cuenta con el calor y la humedad. ¡Sigue leyendo y descubre cómo disfrutar del verano sin preocupaciones!

Cuidado con el calor y la humedad
Cuidado con el calor y la humedad: El verano es una época del año en la que debemos prestar especial atención a nuestra salud íntima. La combinación de calor y humedad crea un ambiente perfecto para el crecimiento de bacterias y hongos en la zona genital, lo que aumenta el riesgo de infecciones como la candidiasis o la vaginosis bacteriana.
Para prevenir esto, es fundamental mantenerla seca y bien ventilada. Opta por ropa interior de algodón y evita las prendas ajustadas que puedan retener la humedad. Después de nadar en la piscina o en el mar, asegúrate de ducharte para eliminar los restos de cloro o sal que puedan irritar la zona.
Si estás en la playa, trata de no permanecer mucho tiempo con el bañador mojado y cámbiatelo lo antes posible. Además, evita aplicar protectores solares en esa zona, ya que pueden alterar el equilibrio de la flora vaginal y provocar infecciones.
Otro consejo útil es llevar contigo toallitas húmedas desinfectantes para refrescar y limpiar la zona cuando no tengas acceso a una ducha. También puedes utilizar polvos de talco para mantener la zona seca y libre de humedad.
Consejos para una correcta salud íntima
Como hemos visto en el apartado anterior, el calor y la humedad pueden aumentar el riesgo de infecciones en la zona íntima. Por eso, es importante seguir una serie de recomendaciones para mantener una correcta salud íntima durante todo el verano.
En primer lugar, opta por jabones suaves y específicos para esta delicada área, evitando los productos con perfumes o colorantes que pueden irritar la piel. Además, no olvides secar bien después de la ducha o del baño, ya que dejar la piel mojada puede favorecer el crecimiento de bacterias y hongos.
También es fundamental cambiarse de ropa interior a diario y optar por prendas de algodón, que permiten una mejor transpiración y evitan la acumulación de líquidos. Durante la menstruación, recuerda cambiar el tampón o la compresa cada 4-6 horas para evitar infecciones. Si eres de las que sufren de infecciones recurrentes, no dudes en acudir al ginecólogo para descartar cualquier problema de salud subyacente.
Por otro lado, evita el uso de duchas vaginales, ya que pueden alterar el equilibrio de la flora vaginal y provocar infecciones. Si estás embarazada, consulta con tu ginecólogo antes de utilizar cualquier producto en la zona íntima.
En cuanto a la higiene sexual, utiliza preservativos en las relaciones sexuales y evita el sexo anal seguido de sexo vaginal sin lavarte previamente, ya que esto puede transmitir bacterias de la zona anal a la vagina y provocar infecciones. Además, si notas algún síntoma anormal, como picor, ardor o flujo anormal, no dudes en consultar a tu ginecólogo.